Nueva carta. Esta vez una Provincia. La primera vez que es atacada, el atacante tiene que descartarse de tantas cartas de la mano como número de atacantes que haya enviado.
Como es habitual, los efectos de las provincias son devastadores. Ganar un conflicto con 2-3 cartas menos de las que pensabas y ya habías incluido en tu estrategia no es tarea fácil. Por suerte esta provincia solo se activa una única vez...
El valor de defensa de la Provincia es de 4, que es el valor estándar, y su elemento es Fuego.
Voy a aprovechar la entrada para ver otras provincias.
El Arte de la Paz, la Provincia Especial de la Grulla, también con defensa 4, y es de elemento Aire.
Cuando destruyen esta provincia, todos los atacantes pasan a estar Deshonrados y todos los Defensores pasan a estar Honrados.
Otro efecto súper poderoso que puede cambiar partidas totalmente. Si el oponente te ataca esta provincia y te la destruye, las replesalias de la Grulla en su siguiente serán brutales, y además de la posible ganancia y perdida de honor que conlleva para ambos jugadores...
Como parte negativa, el efecto solo se activa si la provincia es destruida, por lo que se puede jugar en torno a ello.
Furia elemental. Una provincia Neutral, de elemento Agua. También de Defensa 4.
Cuando es revelada (la atacan por primera vez) el defensor puede cambiar el anillo en conflicto por otro que no haya sido ganado aún.
Otro efecto muy bueno que puede frustrar los planes del oponente o mitigar un posible ataque contra nosotros con un efecto de anillo menos deseado. Desde luego tiene múltiples usos.
En general las cartas de provincia serán todas muy odiadas y habrá que tenerlas muy en cuenta cuando nos lancemos al ataque, ya que alteran los conflictos de forma significativa.
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